Archivo de diciembre de 2011

AMADAMENTE MORENO

¿Aún duermes

bajo la encina el doliente sueño

de tu fugaz infancia?.

¿O perlas

tu venerado rostro, amadamente moreno,

con gotas de afanes que derivan en niebla?.

Tus manos,

engrandecidas por la devoción

con que te tengo,

consuelan la sangre desengañada

que brota en extravíos por esta piel sin tiempo.

Aún te presiento

y no querré nunca difuminarte,

tocado por ese sino que hacía florecer

los olvidados olivos de un campo sin sueño.

Acúname en esta tarde rota

por la distancia que se separa

tu fría tierra de mi desangrado corazón;

y al oír de nuevo tus tiernos lamentos,

reconoceré, quedamente, los charcos y cielos

que conformaron mis silencios junto a los tuyos.

EL ORDENADOR

Para no quedarme atrás,

pues siempre he sido muy práctica,

este año he decidido

ir a clases de informática.

Voy contenta el primer día,

la cosa debe ser fácil,

¿por qué no voy a aprenderlo

si hasta los niños lo hacen?

El profesor muy amable

nos enseña a conectarlo

¿sabe algo de ordenadores?

sí señor, yo sé limpiarlos.

Hay un pequeño artilugio

que se le llama ratón,

y moviéndolo con gracia,

el puede con casi tó.

Le pongo la mano encima

y le doy un buen meneo,

pero así no pasa nada,

hay que utilizar el dedo.

Al principio esto cortada,

y lo miro con recelo,

pero dice el profesor

que trabajemos sin miedo.

No se estropea tan fácil

lo más que puede pasar,

es que me salgo de un sitio,

y después no sepa entrar.

Perdiendo el miedo al cacharro,

es cuestión de practicar,

y me meto encada jardín,

de donde no sé escapar.

Profesor, por favor,

me mira aquí a ver qué pasa,

que ya esto fuer de España,

creo que estoy en la Nasa.

Esos son muy quisquillosos,

y me veo en televisión,

acusada de espionaje

sin saberme una lección.

Voy haciendo todo bien,

ni una vez me he despistado.

¿no será este ratón,

que me salió espabilado?.

Van pasando las semanas,

y debo reconocer,

que para mí la informática,

es hueso duro de roer.

No me veo mucho futuro,

manejando el ordenador,

pero no pienso ceder,

a ése lo domino yo.

Ya verán de aquí a diez años,

como estoy más enterá

no tengo ninguna prisa,

y estoy en muy buena edad.

HACIENDO CAMINO

Somos de un pueblo andaluz

llamado Fuente Obejuna

del que un día quisimos emigrar

pues allí la vida era muy dura,

muy dura que llevar.

Pues cuando éramos pequeño,

ya empezábamos a trabajar,

tanto que a veces los mayores

no nos podían igualar.

Un día nos llegaron rumores,

de que había una ciudad más allá

llamada Barcelona

y que allí podríamos prosperar.

Dejar el pueblo fue muy duro

muy duro de llevar

pues allí dejamos a nuestros padres

hermanos, amigos y muchas cosas más.

Después de un largo viaje,

y mucha ilusión llevar

por fin al día siguiente,

llegamos a la gran ciudad.

Allí que bonito era todo,

jamás habíamos visto nada igual,

pues nuestra pobre economía,

nos había impedido viajar.

Con que ilusión volvíamos de vacaciones

a nuestro pueblo natal,

para ver a los nuestros

y poderlos abrazar.

A lo largo de los años

hemos podido luchar

para crear una familia

y a nuestros padres algo mandar.

En un bar nos reuníamos

pues hay algo que destacar

ellos eran mañicos

y muy llenos de bondad.

Gracias a algunos paisanos

que son dignos de destacar

pues ellos lucharon mucho

para que la casa de Fuente Obejuna

esté cerca de nuestro hogar.

Aquí todos nos reunimos

para bailar y cantar,

algunos chistes contamos

y que viva nuestra amistad.

    JOTA

Aunque vivo en Barcelona

me acuerdo de Andalucía

por su clima y por su aroma

que por nada cambiaría.

Hay un sol divino

bajo un cielo azul,

que alumbra el camino

del pueblo andaluz.

Con miles de rosas

por estos balcones

son maravillosas

nuestras vacaciones

Si vas a Fuente Obejuna

pasando por las aldeas

en mi tierra, por fortuna,

la más bonita que veas.

Si por la mañana,

entre otras cosas

ves, a tres hermanas,

bajo una mimosa.

Las tres en la sombra,

hacen sus labores

y los niños cortan

sus ramos de flores.

  MORIBUNDOS

Sus ojos moribundos.

Una página oscura

cegaba sus pupilas

como tiempo maduro.

Amenaza la muerte

en silencio, rompe

recuerdos de la vida.

Su cuerpo, su alma yace

en el olvido amargo

de un rostro moribundo.

AL AGRICULTOR

 Agricultor, agricultor,

hombre duro y abnegado,

Hombre gallardo y tenaz,

por la sociedad discriminado.

Que de ilusión y mesura,

por Dios ha sido colmado,

para llevar con orgullo,

la cruz que te ha tocado.

De tus padres aprendiste,

y ellos de tus antepasados,

esa experiencia tan sabia,

que es tu libro sagrado,

de cómo sacar a la tierra,

ese fruto tan codiciado.

Ser agricultor muchos intentaron,

y solamente lo son aquellos que lo mamaron.

Del oficio del labrador,

muchos viven engañados;

les parece cosa fácil,

a Doctores y Letrados,

y todos ellos fracasan,

cuando el oficio han trucado;

y ven que es tan difícil,

el libro, como el arado.

Tú sabes cuidar la tierra con ternura,

te entregas en cuerpo y alma,

sin temor a la aventura;

sabiendo el riesgo que corres,

y lleno de templanza y mesura,

vas arrancando poco a poco, una a una,

las cosechas presentes,

las posibilidades futuras.

De la sociedad mereces,

más protección y amparo,

que reconozcan tu labor;

que es la de gran artesano,

pues eres el más noble,

el más trabajador y honrado,

y el que mejor sabes respetar,

familia, moral y Estado.

MANUEL ÁNGEL

Manuel Ángel,

que ricura, que travieso, que risueño,

que dulzón;

de promesa de futuro, que tres años

de ilusión.

Manuel Ángel,

yo te miro, yo te admiro, y se llena

de grandeza el corazón;

al mirarte, al tenerte, al quererte,

al quererte ya tan niño y juguetón,

vivo y sueño con tu imagen, Manuel Ángel

y es tu vida,

el futuro de esta tierra tan querida,

Fons Mellaria, con razón:

Hay belleza y alegría en la calle,

Fuente fresca, que frescura.

Tan unida tierra y vida,

Miel en hilos de dulzura.

A MI QUERIDO PUEBLO

Villa enclavada en un cerro,

que invita hacerte poesía,

poesía, por tu gran belleza,

poesía, por la hidalguía.

Musa fuiste del poeta,

manantial del escritor,

y de mí, eres orgullo,

¡villa del comendador!.

Nadie pasa sin mirarte,

tú posas, y se detienen,

es única tu hermosura

y la elegancia que tienes.

Fuente Obejuna, te llaman,

tu nombre suena a dulzura,

a miel, a abeja, a hidalguía, a hermosura

a eso suena ¡FUENTE OBEJUNA!

LA BIBLIOTECA

La biblioteca contiene

las esencias del saber,

con temas tan variados,

que ayudan a la cultura

a elevar su nivel.

¡Cuántos pensamientos encierra

sus libros alineados!,

aforismos y metáforas,

la prosa y la poesía,

la literatura extensa,

el arte tan combinado,

la historia, ciencias puras y aplicadas

y también la geografía.

Con las biografías conocemos

a personas fabulosas,

que escribieron con su espada,

con su pluma o con su ciencia,

capítulos en la historia

que las hicieron famosas

y nos legaron a todos

su saber y su presencia.

No olvides que en esta fuente,

si cultura has de beber,

cual venero inagotable

la Biblioteca contiene

las esencias del saber.