El mal tiempo que ha afectado a la provincia de Córdoba durante todo el fin de semana tuvo ayer tarde al viento como incómodo protagonista, hasta el punto de que causó algunos problemas y daños en varias zonas de la provincia.
Así, en Los Pedroches, las fuertes rachas de viento alcanzaron hasta 120 kilómetros a la hora al mediodía, derribando tejas, macetas situadas en balcones, árboles y ramas. La Policía Local de Pozoblanco dio cuenta de que el viento derribó señales de tráfico, dobló un cartel de señalización en la entrada a la ciudad desde El Guijo, tiró un cable eléctrico en el camino de la Dehesa Boyal y destrozó un cartel publicitario.
Por su lado, en Palma del Río, la fuerza del viento consiguió arrancar un tejadillo, que acabó cayendo sobre un coche que estaba aparcado en la calle.
El fuerte viento también rompió ayer tarde la catenaria de Renfe a la altura de Montoro, lo que mantuvo cortado el tráfico por ferrocarril y causó varias averías al caerse varias ramas de árboles sobre la línea eléctrica de circunvalación. El polígono Camino de Morente también se vió afectado, según informó la alcaldesa, Ana María Romero.
También en Fuente Obejuna se produjeron algunas caídas de árboles y deterioros en algunos accesorios del mobiliario urbano.
En otros puntos de la geografía cordobesa fueron daños de tipo doméstico los que dejaron a su paso las rachas de viento que atravesaron la provincia. Sobre todo fueron caídas de tejas o trozos de voladizos, algunas antenas y accesorios o elementos ornamentales colocados en las zonas altas de las casas, pero sin tener que lamentar ningún tipo de daño personal.
A.M. Caballero – E. Manzano