La vuelta del ganado al recinto ferial y la celebración de la tradicional subasta de ovino -ausentes el pasado año por las limitaciones impuestas por la fiebre aftosa- devolvieron su esplendor a la Feria Agrícola y Ganadera (FAGA) de Fuente Obejuna, que volvió a brillar como en las mejores ocasiones. Más de 10.000 visitantes se acercaron entre el 14 y el 16 de septiembre pasado a los 50 pabellones instalados en los 8.400 m2 del recinto ferial, certificando el renacimiento de un certamen que traía como novedades una exposición de tractores, un stand dedicado a la helicicultura -cría de caracoles- y una nueva nave de 400 m2 para ganado. Antes de la inauguración oficial, en la que se dieron cita personalidades como María del Mar Giménez, delegada de Agricultura de la Junta de Andalucía, Ana María Romero, diputada de Agricultura, y la alcaldesa de Fuente Obejuna, Isabel Pérez, se guardaron tres minutos de silencia en recuerdo de la víctimas del atentado de Nueva York del pasado 11 de septiembre.
La resucitada subasta de ganado ovino volvió a marcar los momentos de mayor animación de la feria. El volumen de ventas alcanzó los 4,5 millones de pesetas y se vendió el 92% de los lotes presentados. Los remates más altos correspondieron a un lote de merinas de la ganadería de Luciano Fernández Morillo, de Castuera, que se adjudicó por 181.000 pesetas; un macho de merino del ganadero Juan Quintana Gómez, de Campanario, por el que se pagaron 39.000 pesetas; y un macho de reza Fleichaff de la ganadería Castillo de Mogábar, de Torrecampo, que alcanzó las 61.000 pesetas.
Paralelamente, se celebraron las tradicionales jornadas técnicas para ganaderos y diversas actividades deportivas, entre las que destacó una carrera de galgos en la que compitieron más de 30 ejemplares.