Campo arcón forrado de encinares. En su esquina más tibia, una candela. El contraste de invierno dibuja sus fantasmas. Los leños van pasando suavemente. Una silla de enea, unas tenazas, aceite de un candil para las sombras. Y entonando los tiempos un gato de misterio con mi nombre.
|
Rafael Gómez Rivera
Enlace permanente a este artículo: http://www.bibliotecadefuenteovejuna.com/2011/12/rafael-gomez-rivera-2/