Retornando a Mellaria

Corría el siglo II antes de Cristo cuando un grupo de personas, procedentes de distintos lugares diseminados y del paraje cercano conocido como Cerros de los Castillejos se convertían en los primeros habitantes de Mellaria. La riqueza de sus minas y su situación estratégica entre Córdoba y Badajoz explican la prosperidad del lugar, en el que nacen personajes que, a la postre, gozarían de una gran relevancia, como Cayo Sempronio Sperato, cuya tumba monumental se encuentra en torno al embalse de San Pedro, junto a varias estatuas ecuestres.

Al final del siglo I antes de Cristo, Mellaria alcanza su mayor apogeo. Prueba de ello fue la edificación de su foro, templos y edificios destinados a espectáculos. Pero las circunstancias adversas provocaron que la decadencia del lugar llegara durante los siglos tercero y cuarto, razón por la que sus ciudadanos se vieron obligados a trasladarse a la Sierra de los Santos y, específicamente, al monasterio cristiano de Penna Mellaria -cuya traducción es peña Mellaria-. No sería el lugar definitivo para estos vecinos debido a que su ciudad fue destruida en la baja Edad Media, circunstancia que les hizo establecerse en la Fuente Obejuna actual, cuna de los mellarienses, ya que el gentilicio sí se ha mantenido históricamente.

Los restos de este enclave los conocemos gracias a las investigaciones iniciadas en el año 2013 que, encuadradas en el proyecto denominado Mellaria Romana, ha dirigido el profesor de Arqueología de la Universidad de Córdoba Antonio Monterroso Checa. La existencia de Mellaria ha quedado verificada mediante la utilización de cuatro satélites de radar, pertenecientes a la Agencia Espacial y el Ministerio de Defensa Italiano. Su uso, en palabras del investigador, constituyó en el 2017 «toda una novedad tecnológica» que permitió el análisis de 49 metros cuadrados de terreno. Estas conclusiones se ratificaron en el año 2019, gracias al uso de gradiómetros, en tres kilómetros de Masatrigo, que es como se denomina el lugar donde se ubica la ciudad que fue cuna de los mellarienses.

El empleo de esta metodología prescriptiva llevó al Ayuntamiento de Fuente Obejuna, presidido por Silvia Mellado, a destinar 340.000 euros del remanente municipal a la adquisición de terrenos, que se encuentran situados a 38º17’40’’N 5º20’23,7’’W y que disponen de un no muy complicado acceso desde la carretera Nacional 432 por su margen derecha, sentido Córdoba.
33 Mellaria 8 Edificio localizado en el trabajo previo de verificación.

La sospecha de la posible existencia de restos de una calzada romana que llegaría hasta la capital ha propiciado además la firma de un convenio entre la Diputación y la UCO, encaminado a su verificación y, en caso afirmativo, se contempla la creación de una ruta senderista que partiría desde la misma entrada de la institución mencionada en primer lugar, a la que se sumarían todos los yacimientos arqueológicos del norte de la provincia cordobesa y que tendría su fin en Mellaria.

El mismo acto oficial de presentación de la compra de los terrenos, que tuvo lugar esta semana en el Palacete Modernista de Fuente Obejuna en esta misma semana, el delegado de la Junta de Andalucía, Antonio Repullo, anunció la inclusión en los presupuestos de la Comunidad Autónoma de una partida económica destinada a este proyecto.

Tras tener conocimiento de esta decisión, Monterroso estima que la Universidad de Córdoba podría emprender prospecciones geofísicas durante los meses de junio o julio de este año, por lo que, para el director de proyecto, las excavaciones podrían iniciarse en septiembre.

De ser así, después de varios siglos y deteniéndose en el de Oro por el «todos a una» de Lope de Vega, la suma de esfuerzos de las administraciones podría hacer posible que los mellarienses retornaran a su origen, que tienen la suerte de conocer y que se denomina Mellaria.

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