Sorpresa fue el término más utilizado por las personas que se desplazaron hasta la aldea mellariense de Piconcillo y contemplaron la exposición que allí puede verse sobre el cosmos. El presidente de la Asociación Astronómica, Francisco Manuel Santos, les dio la bienvenida y la decana del Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos de Minas de Córdoba, María del Carmen García, recordó que la muestra solo ha pasado por dos lugares: Palma del Río y Piconcillo. Asistentes como Juan Antonio Cruz, de Peñarroya-Pueblonuevo, manifestaron que «la primera impresión ha sido favorable y es envidiable que pueblos más grandes no tengan esta ocasión». Cruz añadió que «habría que dar más publicidad y llevarlas a pueblos de más población, donde se pudiera introducir a sus habitantes en la astronomía».
Por su parte, el belmezano Camilo Cano, ingeniero de minas, dijo que «no esperaba que una aldea de Fuente Obejuna pudiera tener una exposición tan brillante e ilustrativa de un mundo tan interesante como el estelar». Su compañero de profesión Javier Arroyo, que se desplazó desde Córdoba para acudir a la muestra, mostró su sorpresa porque «un lugar de tan solo 80 habitantes pueda contar con un observatorio astronómico que, además, es muy conocido».
Y el joven Pablo Allepuz destacó las explicaciones ofrecidas por Francisco Manuel Santos acerca del telescopio.