Las cuentas municipales para el 2002 ascienden a 700 millones de pesetas, disminuyendo en 169 con respecto a las de este año.
Este presupuesto es calificado como “austero” y “continuista” por el equipo de Gobierno que forman PP y PA, que resaltan los 135 millones de inversión en El Blanquillo; las actuaciones en Piconcillo, Argallón y Cardenchosa; la partida para el museo de la flora en Alcornocal; las subvenciones destinadas a deportes, a la escuela de música y a empresarios; y la partida de 10 millones para el arreglo de caminos.
Los socialistas, por su parte, destacan la subida del 2 por ciento en las retribuciones del equipo de gobierno, que ascienden a un 41 por ciento del capítulo de gastos, el incremento de la partida destinada a gratificaciones y critican la bajada en 144 millones producida en las inversiones.
Las cuentas se aprobaron con los votos afirmativos de PP y PA en una sesión que no contó con la asistencia de los ediles del PSOE, hecho que su portavoz, Agustín Martín califica de “talante antidemocrático del equipo de Gobierno, que no ha esperado al grupo socialista para la celebración del Pleno”. Martín denomina esta actuación como “falta de respeto inexplicable”.
Por su parte, el equipo de gobierno afirma que la sesión se inició pasadas las nueva y que los concejales socialistas “nunca dijeron que iban a asistir”.