Un momento de la procesión del patrón, San Sebastián. – EVA M. HERAS
En Fuente Obejuna se celebró ayer el día del patrón, jornada en la que se volvieron a repetir tradiciones como la ofrenda de naranjas o la rifa del nabo de San Sebastián y que finalizó con una degustación de migas sufragada por el Ayuntamiento
Los vecinos de Fuente Obejuna solicitaron ayer la protección de San Sebastián en la misa solemne que, cantada por el coro parroquial, puso fin a la novena dedicada a su patrón. Tras la eucaristía, a la que asistieron la alcaldesa, Isabel Cabezas, y la concejala Joaquina Alonso, tuvo lugar la procesión –más corta que lo habitual debido a las condiciones meteorológicas–, en la que el acompañamiento musical lo puso la banda municipal. También se entregaron las naranjas bendecidas por el párroco, Juan Laguna, y se rifó el conocido «nabo de San Sebastián», que antes era una hortaliza y hoy, un pastel. Los actos finalizaron con la degustación de un plato de migas.
El empeño en que esta tradición no desaparezca se debe en gran parte a un reducido grupo de personas que, trasladando durante todo el año y por varios domicilios la pequeña capilla que contiene la imagen del Santo, donada por Mati Cortés, recaudan unos fondos que se suman a los obtenidos en el sorteo del nabo y los emplean en la conservación de la ermita, lugar que ellas mismas limpian y acondicionan para los cultos. Aunque para celebrar la onomástica de San Sebastián cuentan con la colaboración del Ayuntamiento, de la residencia Los Angeles y de la parroquia Nuestra Señora del Castillo, estos colaboradores, en su mayoría vecinos y vecinas de la plaza y calle Santo, son, sin duda, «los protectores del patrón».
Diario Córdoba e Infoguadiato.
