La parroquia de Fuente Obejuna y la oenegé Manos Unidas organizan, en colaboración con el Ayuntamiento, la Fiesta de la Solidaridad, en la que reciben donativos de familias, empresarios, asociaciones, colegios de primaria y cofradías.
Vecinos solidarios
Comenzaron los alumnos de primaria y sus maestros realizando belenes. Algo más tarde se sumaron la banda joven, el Club de Lectura, el Centro de Educación Permanente y el Coro Parroquial, dedicando buena parte de su tiempo libre a los ensayos. Simultáneamente, un grupo de voluntarios distribuía sobres a cada una de las familias mellarienses. De esta forma, todo quedó listo para la Fiesta de la Solidaridad que, organizada por el Area de Cultura del Ayuntamiento y contando con la colaboración de la residencia Los Angeles, se celebró ayer en el teatro. Allí se demostró que, una vez más y a pesar de los tiempos que corren, los más necesitados siguen presentes en las mentes de los vecinos de Fuente Obejuna.
Quienes acudieron tuvieron la oportunidad de adquirir dulces caseros, disfrutar con canciones populares, teatro, música clásica y con un recital literario. Fue la recompensa por sumar su granito de arena a las aportaciones de los premios de belenes que los pequeños donaron a Manos Unidas, a la de los empresarios, asociaciones, cofradías y a la de los vecinos. Hasta la localidad se desplazó también el que fue técnico de Cultura en el Ayuntamiento hasta su jubilación, José Moruno, voluntario de esta oenegé como Jesús Aguilar, quien explica que la actividad «es la más importante de las que se organizan a lo largo del año». Y también una fiesta, la de la solidaridad.
