Es sin duda uno de los olores que todo el mundo recuerda por agradable y, si fuera posible, un elevado número de personas disfrutaríamos desayunando pan recién hecho. Con el paso del tiempo, las costumbres han cambiado y no es habitual que conozcamos el proceso artesanal de elaboración del mencionado alimento. Eso fue hasta hace ocho años, fecha en la que en el pequeño núcleo de población de Los Pánchez surgió la iniciativa de celebrar la Fiesta del Pan, a la que se añadió la muestra de artesanía, en la que están representados prácticamente todos los productos que podamos imaginar, confeccionados en cuero, huesos de melocotón, cinegéticos o caseros, que elaboran las asociaciones.
La importancia de esta fiesta la marcaron las más de 4.000 personas que la visitaron ayer y las numerosas autoridades asistentes: alcaldesa y miembros de la Corporación, el presidente de la mancomunidad, diputados, cargos del PP y PA, directivos de la asociación El Toril y hasta el delegado de Turismo, Juan Torres.
Los 9 panaderos de Córdoba, Cádiz y Fuente Obejuna repartieron la masa entre los niños para posteriormente cocer sus panes en un horno de leña y los pequeños de Los Pánchez Ana Belén y Paula Agredano, junto a Miriam, Andrea y Carolina Martínez, repartieron los panchetes a lomos de un borriquillo al que se abalanzaba literalmente el público asistente.
Más tarde tuvo lugar la degustación de los 300 kilos de migas que la asociación El Toril preparó para unas 2.000 personas, obsequiando a los que se acercaban a la degustación con un cuenco cerámico. Por la tarde tuvo lugar el espectáculo ecuestre y actuó el grupo rociero belmezano A nuestro aire .
Como no hay nada mejor para acompañar el café que un dulce, se elaboraron y degustaron algunos caseros: magdalenas, perrunillas, tortas quemás y bollitos de leche. Por la noche hubo baile con Crisol y durante todo el día, animación infantil.
Para la jornada de hoy, además de las actividades relacionadas con el pan y los dulces, están programados un concurso de tirachinas y una exhibición de perros de agua. Ya saben, hoy, el pan recién hecho, el olor del horno de leña y la fiesta se encuentran en Los Pánchez.
